Almuerzo o Cena ¿Cuál elegís para dar importancia?
Hoy quiero hablarles de un tema completamente distinto a los que hemos tratado en entradas anteriores del blog. Se trata de un debate bastante común: ¿cuánto deberíamos comer y cuán contundente debería ser la comida según el momento del día?
Estuve reflexionando al respecto, y como fiel defensora de que cada persona debe alimentarse según su necesidad y apetito, quería compartirles mi mirada.
Personalmente, creo que la comida más fuerte del día debería ser la cena. Durante el almuerzo, si consumimos platos demasiado pesados o altos en calorías, el proceso de digestión puede generarnos fatiga y hacernos sentir más lentos en pleno día. En cambio, una cena más sustanciosa no solo nos reconforta y nos da placer como premio después de una jornada larga, sino que también puede ayudarnos a relajarnos y conciliar mejor el sueño.
Claro que no estoy hablando de comer hasta “reventar”, sino de permitirnos un poco más, quizás con opciones más calóricas como pastas, salsas, guisos..
Este tema no tiene que ver con dieta o planes alimentarios ni con subir o bajar de peso, sino con la intensidad y el momento en que elegimos disfrutar nuestras comidas. Cada cuerpo es distinto, y lo importante es escuchar lo que necesitamos. Esta es simplemente mi opinión, basada en lo que a mí me funciona y me hace bien.